«No queremos noticias negativas o positivas, sino honestas». La ONG ‘Red Acoge’ presentó ayer en la capital riojana su estudio ‘Inmigranacionalismo’, un informe para el tratamiento de la inmigración en los medios de comunicación, una herramienta que debe servir para que los periodistas eviten el sensacionalismo y la criminalización en las informaciones sobre esa área.
Realizado a lo largo del pasado año con el seguimiento de 1.700 noticias, el análisis del libro de estilo de 25 medios de comunicación y la realización de un centenar de encuestas a profesionales, el estudio fue desgranado ayer, en la Casa de los Periodistas, por sus autores, Manuel Sobrino y Enma Garrido, quienes fijaron como las claves a erradicar la atención injustificada a la nacionalidad, los alarmismos por el proceso migratorio y la criminalización de los inmigrantes.
Entre los errores más habituales señalaron el uso de un lenguaje incorrecto, con términos como avalancha, ilegal, horda o asalto; el abuso de fuentes gubernamentales frente a la escasez de testimonios de los inmigrantes; pero también la utilización de terminología militar, la creación de estereotipos, la falta de contextualización, el alarmismo, la simplificación y la equiparación de inmigración y pobreza.
Tras coincidir en que son conscientes de que «no existe mala intención por parte de los periodistas a la hora de tratar estas informaciones», Sobrino y Garrido alertaron de que «cuando los medios de comunicación repiten un mensaje, al final la gente se lo cree y se puede generar una alarma social». Frente a ello, los autores del estudio aconsejan a los profesionales, que recordaron que son «actores claves a la hora de crear ambientes más integradores y de cohesión social», que sean más proactivos, faciliten los testimonios de los inmigrantes como seres humanos individuales en vez de cómo parte de una colectividad homogénea e impulsen la relación entre periodistas y ONG para contar con su ayuda y complicidad.